¡Es Oficial!

¡Es Oficial!

It’s Official!

Es oficial. La Secretaria de Estado ha verificado suficientes firmas para desencadenar una elección para la destitución de Gavin Newsom.
Este es un logro de proporciones históricas: la campaña de firmas más grande de nuestro país y el mayor movimiento de ciudadanos de nuestro estado.
En teoría, Newsom aún podría detener las elecciones acosando a las personas para que retiren sus firmas. Pero con al menos 130.000 firmas de sobra, eso es bastante improbable. De hecho, el autor acaba de retirar el proyecto de ley para exponer el nombre y la dirección de los firmantes de la petición.
Como señal de su desesperación, Newsom me está atacando personalmente usando su cuenta de Twitter “Stop the Republican Recall,” y acaba de recibir una donación de $ 25,000 de un contratista de trenes de alta velocidad quien recibió $ 2,2 mil millones. La hoguera de la corrupción está completamente encendida.
Este retiro del mercado puede poner fin a la era de la corrupción, ya que el declive constante de nuestro estado, ahora una caída libre, se invierte rápidamente y comienza una nueva era para el Sueño de California.

It’s Official!

It’s official. The Secretary of State has verified enough signatures to trigger an election for the removal of Gavin Newsom.
This is an achievement of historic proportions: our country’s largest ever signature drive and our state’s greatest ever citizens movement.
In theory, Newsom could still stop the election by harassing people into retracting their signatures. But with at least 130,000 signatures to spare, that’s rather unlikely. In fact, the bill to expose the name and address of petition signers was just withdrawn by the author.
As a sign of his desperation, Newsom is personally attacking me using his “Stop the Republican Recall” Twitter account, and he just received a $25,000 donation from a high-speed rail contractor that was awarded $2.2 billion. The bonfire of corruption is fully ablaze.
This Recall can bring the era of corruption to an end, as our state’s steady decline – now a freefall – is swiftly reversed and a new era for the California Dream begins.

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