Aprendizaje y Negocios

Muchas personas creen que aprender significa entrenar, ven el aprendizaje como algo secundario, un adorno, sin vínculos con los resultados. Para muchos aprender significaría “absorber información”, no creen que escuchar a un profesional o leer un texto de negocios produzca cambios en el futuro que uno está creando, este punto de vista tal vez proviene del estilo pasivo de memorizar que muchos asocian con las escuelas latinoamericanas, por eso, la realidad es que, los latinos aprendemos con el tiempo y en la vida real, no en el salón de clase ni en sesiones de entrenamiento y nos sale mucho mas caro, tanto en dinero como en seguridad y familia, pero debemos analizar que aprender es aumentar la capacidad mediante la experiencia de otros, el aprendizaje es “no cometer los errores que otros cometieron”.

Los ejemplos son claros, en los Estados Unidos mas de quince millones de personas están registrados en una lista negra (“Check System”) por problemas con cheques sin fondos o descubiertos en su cuenta bancaria, sumados a los mas de un millón por año que presentan bancarrota y por siete años desaparecerá de la lista de “ciudadanos respetables”, sin contar las de doce millones de familias que no tienen acceso a los servicios financieros más básicos: cuentas corrientes, medios de pago y créditos.

La banca tradicional le sale muy caro a quien gane menos de 25.000 dólares al año, una simple cuenta corriente exige tener un balance mínimo de mil dólares para evitar un alto costo de mantenimiento, pero los salarios y los servicios profesionales (jardinería, mecánica, fontanería) se pagan mediante cheques que debemos cobrar o depositar en alguna cuenta, por eso es importante “aprender” como manejarnos con los cheques o las tarjetas de debito o crédito. Recordemos que estas tres “herramientas financieras” son las mas usadas en los Estados Unidos, los cheques han capturado el 45% de las transacciones, detrás se sitúan las tarjetas de crédito con el 29% y las tarjetas de débito con el 17%, dejando solamente el 9% para el dinero en efectivo, la conclusión es clara, los latinos que no aprendieron a manejar sus cuentas financieras, engrosarán la lista negra de morosos, hasta terminar perdiéndolo todo en una bancarrota.

Todos aprendimos cuando llegamos a este país, en el sentido que nos adaptamos a la medida del nuevo mundo que nos rodea, pero algunas personas son más rápidas y eficientes aprendices, la clave está en ver el aprendizaje como inseparable del trabajo cotidiano.

Como dijimos, el aprendizaje no es una cuestión de buenas intenciones o de entrenamiento, sino de un cambio cultural, de una forma de ver la vida desde una nueva perspectiva. Por ejemplo, cuando oímos las palabras “desafío” y “reto” nos preparamos para superar obstáculos, pero no vemos estos términos como sistemas naturales que regulan el crecimiento, que ayudan a evolucionar y crecer a los seres humanos.

Debemos saber que los desafíos o retos son, en realidad, oportunidades para mejorar, para ejercer nuestra atención, comprensión y creatividad. En la cultura china la palabra “crisis” se escribe con dos símbolos que significan “peligro” y “oportunidad”.

Transformar el Peligro en Oportunidad

Tanto en tu vida como en los negocios, aprender a planificar es transformar el peligro en oportunidad, por eso daremos tres tips, que debe aprender quien se aventure a un nuevo negocio:

1. Armar un buen plan de negocios. Mucha gente cree que un plan de negocios es solamente una forma a llenar cuando alguien solicita un préstamo bancario, pero no es solamente eso, un buen plan de negocios, hecho a conciencia, nos definirá los conceptos de nuestro negocio. Mucha gente tiene idea de cómo hacer dinero pero no la ha definido concretamente, es decir, saben qué es lo que quieren hacer con su negocio pero aún no saben los detalles. Les resulta mas fácil empezar y luego acomodar los detalles y necesidades, pero esto es como saltar al vacío sin red, procurando caer parado, encomendándose a Dios, que si bien nos ayuda, debemos darle las herramientas adecuadas. Por eso la mayoría de los negocios exitosos tienen una visión clara de lo que quieren hacer, definiendo el concepto de negocio lo más detallado posible, imaginando a donde quieren llegar, porque hacer un plan de negocios no es difícil, visualiza como si tu negocio ya estuviera en pleno funcionamiento. ¿Qué vez? ¿Es esto lo que quieres? entonces anótalo y desarróllalo. Averigua los costos de cada cosa, haz presupuestos reales basados en costos y gastos generales, incluye los gastos que están escondidos, como la luz, la gasolina… ¡muy importante!… inclusive un salario para ti, ya que serás tu primer empleado, y tu familia debe comer… no olvides gastos adicionales en requisitos y permisos, gastos para contratar empleados, y la baja productividad al principio del negocio. Nunca creas que empezaras ganando dinero, es normal que un negocio nuevo pierda dinero en los primeros seis meses, y no genere ganancias hasta cumplir el primer año. Creer lo contrario te llevara a errores de presupuesto y decepciones. Recuerda que en los primeros seis meses gastaras más de la cuenta en promover tu nuevo negocio, tendrás que hacer ofertas atractivas para conseguir nuevos clientes, incluso perdiendo dinero. No es fácil darte a conocer, y los clientes potenciales tomarán su tiempo en darte la oportunidad y probar tus productos o servicios. Por eso es mejor que tengas dinero extra, no necesariamente tiene que ser efectivo, ni en tu cuenta de banco, pero sí, es importantísimo que sepas de dónde podrás sacar fondos adicionales en caso de necesitarlos. Lo peor es que a nadie le gusta prestar dinero a negocios que están urgidos por falta de planificación. Esta es una muy mala señal. ¿Cómo prestarle a alguien que está a punto de hundirse porque hizo mal las cuentas al comenzar?

2. Definir tu producto o servicio y el mercado: Salvo que tu negocio se parezca a un “Ninety Nine Cent” o “Wall Mart”, no te aconsejo que busques complacer a todos. Si intentas darle a todo mundo lo que todo mundo quiere, al final de día, tendrás clientes confundidos, no tendrás especialidad, tu negocio será muy complicado, y de paso, te quedarás sin identidad. Define bien tu concepto y tu mercado, ya una vez que esto esté definido, entonces dedícate a satisfacer las necesidades de tu mercado. La gente siempre recuerda y vuelve con el especialista, quien hace los mejores tacos, donde se toma el mejor café, quien es el agente más confiable, donde ha comido la mejor comida mexicana. ¿Tú cómo quieres que recuerden a tu negocio?, la respuesta a esta pregunta te ayudara a definir y publicitar tu negocio como tal, aunque tengas el mejor producto o servicio del mundo, si nadie lo sabe, de nada te sirve, pero si ofreces un producto relativamente bueno, y todo el mundo lo conoce, te irá muy bien. En resumen, no subestimes el poder de la promoción, distribución y el precio, analizando el producto o servicio en el contexto general de tus clientes. Nunca creas ni pienses que lo que te gusta a ti, es lo que le tiene que gustar a tus clientes. Recuerda que los verdaderos dueños de tu negocio son los clientes, ellos definen que es lo que quieren y cuanto pagaran por ello, empresarios exitosos dicen que al mercado se le tiene que dar lo que el mercado pide, es decir, tu obligación como emprendedor es encontrar las necesidades de la gente y resolverlas con tu negocio, muchas veces esto va en contra de lo que a ti te gusta, pero recuerda que lo que tú quieres y disfrutas no importa, realmente importa lo que tus clientes quieren o disfrutan. Abre tu mente y pregúntate lo siguiente: ¿Qué es lo que mis clientes quieren o necesitan? Si siempre usas esta práctica, podrás llegar a la excelencia. Por los menos así lo van a percibir tus clientes, ten presente que tu y tu negocio viven gracias a ellos.

3. Contabilidad, Impuestos y Seguros: Una de las herramientas más poderosas para un negocio nuevo, o viejo, es un sistema confiable de contabilidad, costos, stock y flujo de caja. Sin esta herramienta desconocerás tus ventas, tus costos, tus cobros, tus deudas, tus deudores, en fin, todo, después de un tiempo de operación, estos detalles y reportes son de suma importancia porque te dan una visión clara de cómo le va a tu negocio, por ejemplo, es común ver negocios que pierden dinero en ciertas áreas sin darse cuenta, y no saben que en otras áreas les va muy bien, porque cubren las pérdidas de las áreas malas sin percatarse de ello. No importa cuan sencillo o complejo sea un sistema de contabilidad, es importante que lo tengas tú o que contrates un profesional contador, de esa forma estarás preparado para afrontar el futuro. Una de las ventajas de contratar un profesional contador, aparte del ahorro en empleados administrativos, es la asesoria en el área impositiva, porque uno de los errores más costosos para un empresario que quiere trascender, es no pagar los impuestos correspondientes, debes saber que los nuevos negocios tienen más flexibilidad en sus declaraciones de impuestos porque recién comienzan, no tienen los libros 100% al día, reciben mucho efectivo, muchos de los empleados son familiares, etcétera, etcétera. Por tal motivo, es muy tentador reportar menos ganancias y menos ventas para evitar pagar los impuestos requeridos. El problema es que cuando quieras crecer, expandir, adquirir nuevo equipo, o comprar un inmueble, el banco financiero te pedirá tus reportes de impuestos. Mucho del financiamiento dependerá de tu capacidad de pago. Esta sólo la puedes justificar con los impuestos reportados. ¿Vez las repercusiones? Por ahorrarte unos dólares, ahora no podrás comprar esa maquina, o ese local para que crezcas. Estamos en los Estados Unidos, yo se que en Latinoamérica es diferente, pero en este país el no pagar tus impuestos te impone una barrera enorme que impide tu crecimiento. Lo mismo ocurre con los seguros, los latinos tenemos la tendencia de pensar que nada nos pasará, las tragedias le pasan a otros, ¿Por qué a mí? y la respuesta es muy sencilla… ¿Por qué no?, ¿Quién eres para que no te pase a ti?, por eso los seguros de negocio son muy necesarios y no son tan costosos como generalmente se cree. Debes ser realista, usar un poquito el sentido común y la lógica, recuerda que al comenzar tu negocio requerirá mucho esfuerzo y dinero, el esfuerzo es dinero que dejas de percibir, pero el dinero real, los dólares, provenientes de tus ahorros, préstamos familiares, tarjetas de crédito, etc. Tanto en riesgo y ¿no protegerlo? ¿No te suena ilógico? Quizás las probabilidades de que te pase lo peor son muy pocas, pero creo que yo dormiría más tranquilo sabiendo que estoy protegido. Nunca expongas tu futuro y el de tu familia sin protección.

Recuerda que para planificar tu negocio, para definir tu mercado y producto y para manejar tu contabilidad necesitas apoyarte en el aprendizaje, y el aprendizaje pasa por los profesionales, seguro que tu familia o amigos te darán excelentes consejos, seguro que tu mismo puedes solucionar algunas de tus necesidades, pero debes contemplar que hay gente que se especializa en ciertas áreas, que pueden ser muy útiles y ahorrarte mucho tiempo y dinero. Es muy común que si te duele la espalda acudas al quiropráctico, o si te sientes mal te revise un medico, o si te duele una muela veas al odontólogo, por eso, igual que tu, tu negocio necesita que lo asistan, por ejemplo, un abogado creara la entidad legal de tu negocio, un contador armara tu sistema de contabilidad e impuestos, un agente de seguros sabrá cuales se adaptan a tu negocio, un técnico en computación te aconsejara sobre computadoras, impresoras, internet y tu sitio web, un asesor de negocios te ayudara con los costos y gastos, los precios, las ventas, la mercadotecnia, la publicidad, etc.

Sorprendentemente, muchos de estos profesionales no son caros, por el contrario al contratarlos se transforman en una excelente fuente de recursos, aportando ideas a tu negocio que tú nunca habías pensado, incluso algunos te acompañaran en el crecimiento de tu negocio, apostando contigo. Los latinos creemos que un asesor profesional o un libro de finanzas no nos dan la experiencia necesaria… creemos que los “golpes de la vida” son mas efectivos… y es verdad… pero este tipo de aprendizaje puede ser difícil de controlar y las perdidas económicas suelen ser cuantiosas…

Hasta la proxima

Share