Mamá ¿cómo eras de niña?

Ma. Evangelina

Saucedo F.

Observa por un momento a tu mamá, y trae a tu memoria la imagen más antigua que tengas de ella. ¿Ha cambiado mucho?, tal vez un poquito, quizá su color de cabello es diferente o se lo cortó, pero en lo que continúa siendo igual, además de ser la mejor repostera y la más veloz haciendo cuentas en el súper, es en demostrarte el gran cariño que siente por ti. ¿Te cuento algo?, todos vamos cambiando con el tiempo y aunque la conoces hace muchos años ella no siempre fue una persona adulta.

Es normal pensar que los mayores, no han sido niños, porque desde siempre los recuerdas como adultos. Ahora que lo sabes, seguro sientes una gran curiosidad por saber como era tu mamá de pequeña, ¿cierto? Seguramente te preguntas, si tal vez, era una niña traviesa a quien le gustaba perseguir insectos, o quizás en ese tiempo, fue muy seria, como el tío Manuel. A lo mejor le costaba trabajo geografía y debía repetir muchas veces las capitales de los países que no sabía.

¿La puedes imaginar de chica?, pues no te quedes con las ganas y ¡sal de dudas! Decídete a preguntarle y entérate de lo que gustaba hacer en aquel tiempo. Descubrirás cosas muy interesantes y, además, conocerás más de sus sueños y tropiezos, así que ¡prepárate para iniciar un viaje a través del tiempo!

Primero, puedes elaborar una lista con todo lo que te gustaría saber de ella, averigua sobre los juegos que más le divertían y si no los conoces, pídele que te enseñe como jugarlos. Investiga si había algún compañero en la escuela con el que se llevaba mejor, qué materia le costaba más trabajo, y si pensaba en que se iba a convertir de grande: maestra, bióloga o bailarina.

Puedes pedirle un rato para platicar y con tu domingo, invítala a saborear un rico helado de frambuesa y chocolate. Exprésale tu interés por saber cómo se divertía en las vacaciones, si visitaba la playa, qué canciones cantaba y qué le gustaba leer. ¡Tal vez descubras porque prefieres las historias de terror!

Seguramente un día no será suficiente, por eso, si te quedas con más preguntas, acuerda con ella pasar otra tarde juntas. Invita a tus hermanos y en casa, preparen unas palomitas. Entonces, pídele que te muestre el álbum familiar. Seguro que se divertirán mucho, has que te platique las anécdotas de aquella época, cada foto que te enseñe seguro que tiene una historia, coméntale lo mucho que gustaría saber lo que pensaba, si alcanzo sus sueños y como lo logró. ¿Cómo era vivir en su época?

Te vas a dar cuenta de lo interesante que ha sido su vida y te sorprenderás de lo que sucedía en aquel tiempo. Seguramente tu mamá se sentirá muy feliz de recordar y compartir momentos de su infancia contigo y, por supuesto, que tú disfrutarás mucho de sus historias. Conocer las experiencias que ha vivido, te harán sentir muy unida a ella, y podrás identificar que a la mejor tuvo gustos y sueños parecidos a lo tuyos.

“A favor de la paz, por un México Unido”.

www.sermexico.org.m

bojorge@mexicounido.org.mx