“Ocupar Oakland”: Huelga manchada por violencia

Marcela Gray

Una economía que ha sufrido los estragos de una mala administración pública por parte de los gobernantes se deja ver entre las calles 14 y Broadway de Oakland.
Este movimiento iniciado por “Ocupar Wall Street” en Nueva York, ha extendido sus acciones a varias ciudades de Estados Unidos.
Diariamente se reúnen personas de todas las edades a las 6pm en la plaza Oscar Grant sin ningún tipo de liderazgo ni ningún plan de acción, solo para expresar ideas y votar las que mejor les parezca por consenso general.
Unos se quejan de la distribución de la riqueza, el tener que pagar impuestos, el desempleo, el cierre de escuelas, de las fuerzas armadas y cómo quitarle poder a las grandes corporaciones para lograr una democracia real.
Sin voceros oficiales, la prensa ha tenido que entrevistar al azar porque en este paro no existen líderes.
Marcada violencia
La violencia se ha desatado en esta ciudad, sin medir que a este movimiento asisten niños, mujeres y ancianos que pueden salir heridos por este tipo de actos. Se informa que han sido arrestadas un total de 200 personas por lanzar objetos y confrontarse con la policía.
“Creo que todas las personas tienen el derecho de expresarse pacíficamente sin vandalismo y respetando la propiedad ajena”, indicaba Anaxi Vanessa Córdoba, residente de Hayward.
Uno de los detonantes por los cuales este subgrupo es más violento se debe al incidente sucedido el pasado 25 de octubre, en donde salió herido Scott Olsen, un marino veterano de la guerra de Irak que sufrió una fractura de cráneo al impactarle en la frente un proyectil. Pero hasta hoy se desconoce quién lo lanzó.
Una huelga que refleja estragos sociales y económicos
El pasado 2 de noviembre se convocó a huelga general, con una asistencia aproximada de 7,000 personas. Ese mismo día, un grupo de personas decidió romper vidrios y pintar grafitis en varios negocios en los alrededores de la ciudad de Oakland.
En un comunicado de prensa, la alcaldesa Jean Quan deploró los actos de vandalismo y se disculpó con los empresarios afectados.
“La gente está sufriendo económicamente, estamos escuchando a los clientes y los ayudamos; lo importante es que las personas distingan que las instituciones financieras son diferentes”, dijo Rubén Pulido, vocero de Wells Fargo.
De acuerdo a Pulido, en 2010 este banco donó $20,7 millones a escuelas y organizaciones no gubernamentales del Área de la Bahía y actualmente ayuda a muchas personas en proceso de remate de sus casas. A nivel nacional, el año pasado Wells Fargo donó más de $219 millones en proyectos de caridad.
“Desde el 2009 hemos realizado 716,000 modificaciones de préstamos con problemas”, afirmó. Sin embargo, el 2 de noviembre esta organización financiera fue víctima del hampa en el área de Oakland por parte del grupo que se dedicó a violentar establecimientos comerciales.
“Mucha gente no pudo ir a trabajar, tuvimos que cerrar sucursales, no pudieron ir al centro a hacer compras y los locales cerraron, esto evidentemente afecta a la economía y el turismo”, se lamentaba.
El puerto de Oakland, el cuarto más importante del país también sufrió las consecuencias de “Ocupar Oakland”, ya que tuvieron que parar sus operaciones el día de la huelga. Este puerto genera más de 73,000 trabajos en la región, además de tener un impacto diario de $8.5 millones para la economía local.
“El puerto de Oakland respeta los derechos que tienen todas las personas gracias a la Primera Enmienda de la Constitución. También entendemos y respetamos las honorables e innovadoras tradiciones de las acciones de justicia social”, argumentó Robert Bernardo, vocero del puerto de Oakland.
William Barboza, empresario residente de San Lorenzo apoya al movimiento.”Creo que esta manifestación demuestra que el ciudadano americano está viviendo una época como hace muchas décadas no se vivía”, indicó él.
“Considero que ya era hora de que esto se haya dado porque la cultura de este país – en general- hace caso omiso a los problemas que hay y nunca tiende a expresar su disconformidad. Apoyo totalmente esta protesta e incluso si yo pudiera me uniría al grupo”, dijo.
“La mayoría de manifestantes son comunistas, socialistas y anarquistas que odian a Estados Unidos y el capitalismo y los que no, son solamente idiotas que se dejan manipular. Si tuvieran un poquito de cerebro estarían protestando al gobierno en lugar de Wall Street, porque es el gobierno federal el que causó este daño en la economía”, finalizó un residente de Oakland quien prefirió guardar su anonimato.

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