Construcción de campeones

Sam Luna

Más rápido, más fuerte, más alto, son los principios básicos del deporte y cuando se trata de alcanzar marcas y dejar huella en los libros de récord, las habilidades físicas ya no son suficientes, hace falta además que el atleta ponga en práctica la perseverancia, el trabajo en equipo y el esfuerzo. Hoy, también, es indispensable sumar el conocimiento logrado a través de la ciencia y que permite alcanzar el óptimo rendimiento de los atletas.

Ciencia aplicada

a los campeones

El camino hacia el podio de los triunfadores se construye desde el momento en que esta imagen se convierte en un sueño, después será vital la intervención de los especialistas en medicina deportiva, quienes a través de evaluaciones morfofuncionales en las que se mide la masa muscular, la fuerza y el tamaño del cerebro, se determina el tipo de entrenamiento, alimentación, el tiempo que debe transcurrir entre una y otra intervención en competencias, para evitar que haya un desgaste físico excesivo antes de llegar a su objetivo final.

“A partir de la tecnología se hace un comparativo a lo largo de la preparación a fin de verificar que se cumple con las perspectivas planteadas inicialmente. Hay que llevar un control de la alimentación, de la forma en que se deben combinar los diversos grupos de alimentos, así como los suplementos o vitaminas que son necesarios en cada caso en particular”, explica el doctor Roberto Rodríguez Nava, especialista en medicina deportiva y médico responsable de la Selección Nacional Mexicana de Fútbol.

Ganar lo es todo

La anticipación con que se prepara un atleta y los detalles que se deben tomar en cuenta para convertirlo en un prospecto, pueden superar la ficción: Las matemáticas son parte básica en la construcción de un campeón, por ejemplo, en el caso del atletismo, se hacen mediciones comparativas entre la puntuación más alta que se haya establecido y la conseguida por el atleta en cada una de las diferentes pruebas; se miden los tiempos que ambos hicieron, se registran los pasos, cómo fue el braceo de cada uno de los metros recorridos; de esta forma se determina en qué parte de la carrera es más efectivo, ya que hay quien es más rápido en la primera mitad de la competencia y quienes lo son en la segunda parte. “Hacer un registro minucioso de estos detalles marca la diferencia entre ganar y perder. También son necesarias las pruebas de biomecánica para medir la velocidad, observar el movimiento de cada músculo, y definir qué tipo de material se debe utilizar para los zapatos y la ropa que deberá portar el atleta, para ayudar a que su desempeño se vea visiblemente mejorado”, explica el especialista.

Efectos de la ropa

La ropa actualmente está hecha con materiales que le dan cualidades sorprendentes como ligereza necesaria para permitir mayor rapidez. Éstas combinan una o varias divisiones entre sí para crear una capa de aire intermedia, con lo que el sudor se absorbe inmediatamente y se evita el cansancio.

Existe una amplia gama de tenis en el mercado, cada uno con diferentes características que brindan protección al área del pie que está expuesta a un mayor esfuerzo; estos adelantos son producto de la investigación. Por ejemplo: “Si un deportista intervendrá en una prueba como los 800 metros, y sus tenis no son los adecuados, llevará un peso aproximado en los pies de 450 gramos, mientras que unos diseñados específicamente para atletismo pesarán en 80 y 200 gramos. Obviamente la rapidez va en función del peso que tenga que arrastrar el deportista”, afirma el doctor Rodríguez Nava.

Esfuerzo, trabajo y actitud de triunfo, las capacidades físicas, el entrenamiento y la dedicación que cada atleta imprima a su causa, son sin duda elementos indispensables en la construcción del éxito, que aunado a los adelantos científicos y tecnológicos hacen que las justas deportivas sean cada vez más sorprendentes e inspiradoras para quienes toca ser espectadores de verdaderas historias de éxito.

Sam Luna

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