<!--:es-->Verdades sobre el sexo<!--:-->

Verdades sobre el sexo

Los medios masivos han definido a través de las películas lo que es la normalidad en las relaciones de Parejas. Vivimos en una sociedad teóricamente avanzada y abierta, pero en la práctica, algunas personas no se sienten cómodas hablando de su sexualidad. Muchas de las imágenes que abundan en el cine o en la literatura se alejan de la realidad. Y esa enorme diferencia entre lo que lo que fantasea recibir y lo que obtiene, es la causa de todas sus conflictivas en materia sexual.
Si el deseo sexual de los participantes lo colocáramos en una balanza, esta se inclinaría hacia uno de los lados. De esta confrontación, del lado masculino emerge una pregunta: ¿cuántos encuentros sexuales son lo normal? Vivimos en una época donde la sociedad nos hace creer que para alcanzar la felicidad tiene que haber sexo diario. Una persona a la que le apetece poco el sexo no tiene que ser forzosamente una reprimida, y a quien le apetezca diariamente no es un obseso.
Afortunadamente, en todas las situaciones existen muchos matices y caminos intermedios por los que podemos transitar. Si a ella no le apetece una batalla sexual, sino un encuentro algo más tranquilo y romántico, eso jamás debe tomarlo él como un rechazo. Si a él se siente incómodo porque no ha conseguido una buena erección, ella nunca debe interpretarlo como que la vida sexual ya concluyó. Sin embargo, el hombre siempre toma ese acercamiento como un reto a su masculinidad y capacidad de penetración.
Cantidad de hombres viven acomplejados por cuestiones métricas. Los centímetros adquieren una importancia descomunal, pero estadísticamente hablando, en la mayoría de los casos sus medidas se encuentran dentro de “lo normal”. El placer no depende de los centímetros, porque para ellas primero es el romance. Y su estimulación sexual más intensa no es
vaginal, sino a través del clítoris. Pero está demostrado que cuando un hombre no espera demasiado de su pene, este suele responder mejor.
¡La mujer puede aparentar el orgasmo, y los hombres también! Alguien podría pensar que el de ellos es más difícil de simular. ¿Por qué hombres y mujeres fingen? Porque viven teniendo como objetivo un orgasmo celestial, y si este no se experimenta significa el fracaso. De ahí tanta simulación. Nadie quiere ser considerado como “no funcional” El consejo es que se debe disfrutar el camino mientras se va recorriendo, y no del llegar al final.

Share