
Recibe McCain bendición en la Basílica de Guadalupe
El virtual candidato del Partido Republicano a la Presidencia de Estados Unidos, John McCain, visitó la Basílica de Guadalupe, en donde apreció de cerca la imagen de la virgen plasmada en el ayate de San Juan Diego.
La visita que se previó de 30 minutos se prolongó por casi dos horas, durante las cuales, además de apreciar la imagen de la virgen de Guadalupe, recorrió las instalaciones del templo, dio entrevistas a dos televisoras y conoció el papamóvil y la antigua Basílica de Guadalupe.
El senador republicano llegó al templo mariano minutos antes de las 8:00 horas acompañado por su esposa Cindy, por el embajador de Estados Unidos en México, Antonio O. Garza; los senadores Lindsay Graham y Joseph Lieberman, así como el exgobernador de Florida, Jeb Bush.
Al ingresar al santuario por la puerta norte, fue recibido por el rector de la basílica, Diego Monroy, quien les entregó una rosa de color rojo a cada uno de los visitantes.
Posteriormente los acompañó hasta el altar mayor, cuyo extremo es la parte más cercana a la imagen de la virgen, donde McCain y su comitiva pudieron apreciar de cerca la imagen de la guadalupana y depositar un ramo de rosas blancas amarradas con un moño del mismo color en ofrenda.
Luego de que Monroy explicó al político estadounidense el llamado acontecimiento guadalupano, es decir las apariciones de la virgen y la forma en que se plasmó en el ayate de San Juan Diego, el senador McCain fue bendecido por el prelado.
Con las manos posadas en su cabeza, Diego Monroy encomendó a la virgen de Guadalupe a McCain, quien permanecía con los ojos cerrados mientras el religioso le daba la bendición.
Acto seguido, McCain y sus colaboradores fueron guiados a la sacristía, en donde el senador republicano firmó el libro de los visitantes distinguidos, y después fue conducido a la capilla abierta, también llamada balcón papal, donde pudo tener una visión panorámica del atrio.
El virtual candidato presidencial dio entrevistas a dos televisoras, luego de lo cual salió al atrio en donde conoció el papamóvil y la antigua Basílica de Guadalupe.
Un joven que se mezcló con los medios de comunicación gritó consignas al político, lo que alertó tanto a los elementos policiacos mexicanos como a la escolta personal que lo acompaña; sin embargo, el incidente no pasó a mayores.
El senador concluyó su recorrido al ser despedido por Monroy, quien en declaraciones a los medios admitió que las autoridades del templo se vieron rebasadas por los elementos de seguridad.