
Pronostican gran crecimiento de clase media latina Estadounidense
La clase media latina estadounidense experimentará un notable crecimiento en la próxima década, pronosticó un estudio del Instituto de Política Tomás Rivera, uno de los más prestigiados en análisis de la comunidad en el país.
“El proceso de instrucción financiera para la creciente clase media latina puede comenzar ahora, en vez de esperar unos 10 o 15 años” para iniciarla, dijo el presidente del instituto, Harry Pachón.
Agregó que el crecimiento de la comunidad latina con ingresos que van en aumento se debe a diversos factores.
Citó como ejemplo que “hay latinos empresarios, inmigrantes que ya vienen con educación y recursos, otros con educación sin capital económico pero con movilidad de los latinos en la fuerza laboral” estadounidense.
El presidente mencionó a inmigrantes latinos que han conseguido ingresos de hasta un cuarto de millón de dólares anuales, pero que llegaron al país hace años, a diferencia de los recién llegados.
En el estudio denominado “la irreconocida y creciente afluencia de los latinos”, el Instituto Tomás Rivera -de la Universidad del Sur de California (USC)- consideró también el impulso demográfico de los latinos en Estados Unidos.
En el análisis que patrocinó la firma financiera Merrill Lynch, el instituto determinó que “la mayoría de las estrategias de negocios se enfocan en los latinos inmigrantes de reciente ingreso o de primera generación” en el país.
“Pero la mayoría de los latinos no son inmigrantes recientes, y se establecen rápidamente o se dirigen a establecerse en la clase media” estadunidense, agregó.
Actualmente, hasta 36 por ciento de los latinos en Estados Unidos sería considerado de clase media por sus ingresos y lugar de residencia, destacó el análisis.
El estudio presentó dos recomendaciones para ajustar las políticas de instituciones financieras a la creciente comunidad latina y su clase media en la que señala que “el sistema bancario estadunidense carece de adecuación a las necesidades de esta creciente clase”.
Propuso proporcionar servicios como el de hacer efectivos cheques, giros, transferencias, pagos de servicios, remesas y tarjetas prepagadas de teléfono, pero sin costo o con tárifas reducidas por esos servicios.
Consideró que “si la industria hipotecaria reflexiona sus actuales metodologías y amplía actividades financieras no tradicionales preferidas por los latinos, el mercado de la vivienda se vería dramáticamente impactado”.
El director del instituto opinó, por su parte, que las industrias financiera e hipotecaria han menospreciado la movilidad de los latinos en la economía estadundiense.