Periodismo Parcial e Irresponsable, ¿Quién es el Culpable?

“Cuando puedo leer una noticia y no tengo idea de qué lado de la historia está el reportero, esa es una buena noticia.” -Sarah Elizabeth Sanders. Esa afirmación no sólo me parece veraz, sino que también sirve como un recordatorio de lo que solía ser el periodismo.
Según el American Press Institute “El periodismo es la actividad de reunir, evaluar, crear y presentar noticias e información”. Desafortunadamente, hoy en día las charlas, el entretenimiento, la opinión, la afirmación, la publicidad y la propaganda se están confundiendo con el periodismo y cualquier persona con un dispositivo móvil o tiempo aire pagado cree que está haciendo “periodismo objetivo” cuando la mayoría de las veces sólo están poniendo sus sentimientos, sesgos y emociones por ahí.
Actualmente estamos en medio de una crisis sanitaria mundial con el COVID-19 y lo último que necesitamos es la promoción continua de la división y el odio. No importa de qué lado del pasillo provenga la “información”, quienes nos la entreguen deberían al menos pensarlo dos veces antes de infundir temor, sensacionalismo y manipulación con ella.
Durante el 9-11, a pesar de que esos fueron tiempos de gran incertidumbre y todos teníamos miedo de lo que podría venir, los medios proyectaron un claro mensaje de unidad, esperanza y la seguridad de que lo superaríamos… y lo hicimos.
Las circunstancias actuales han creado una atmósfera similar de miedo, pérdida e incertidumbre, pero esta vez los medios nos están enviando un mensaje fatal. Están apuntando dedos hacia la derecha y la izquierda en lugar de resaltar el progreso realizado y en lugar de asegurarse de que la gente se sienta parte de la solución, porque al quedarnos en casa, todos estamos ayudando a aplanar la curva.
El periodismo es una ciencia que algunos consideran un arte. En términos generales, el periodismo consiste en la recopilación, tratamiento, interpretación, escritura y difusión de la información, a través de las redes sociales, prensa, radio, televisión, internet, etc., Su principal objetivo es proporcionar a los ciudadanos información veraz y con carácter general para hacer valer sus derechos ante la sociedad. Entonces, ¿Por qué no hacer eso?
El primer caso conocido de COVID-19 en los Estados Unidos fue confirmado en el estado de Washington el 20 de enero en un hombre de 35 años que había regresado de Wuhan, China el 15 de enero. El Grupo de Trabajo sobre El Coronavirus de la Casa Blanca (WHCTF) se estableció el 29 de enero. El 31 de enero, el presidente declaró una emergencia de salud pública e impuso restricciones de viaje a procedentes de China. El WHCTF presidido por el Vicepresidente Mike Pence ha estado presentando sesiones informativas diarias llenas de información valiosa de varios especialistas que explican dónde estamos con respecto a la crisis, qué hay que esperar y los próximos pasos.
Además de la información y los hallazgos presentados en estas sesiones informativas, el mensaje de esperanza, unidad y patriotismo que se transmite en ellas es lo que el pueblo estadounidense necesita escuchar. Todos sabemos que estamos en problemas, pero también queremos saber que juntos superaremos esto. Lamentablemente, no todos los medios de comunicación están informando con precisión lo que sucede en estas sesiones informativas. No todos los canales los están transmitiendo y si lo hacen, sólo lo hacen por unos minutos. En lugar de promover la unidad, escogen pedazos A2
de esas sesiones informativas sólo para desinformar y promover el caos.
Personalmente he estado viendo esas sesiones informativas a través de la página de Facebook de la Casa Blanca. Mis hijos las miran conmigo todos los días. Ayer estaban admirados de que Mike Lindell, el tipo de My Pillow, dijo el 30 de marzo que dejaron de hacer almohadas para hacer máscaras faciales, y se sorprendieron al oírlo decir: “Dios había sido sacado de nuestras escuelas y vidas.  Una nación le había dado la espalda a Dios.  Y los animo: Utilicen este tiempo en casa para volver a la Palabra, leer nuestras Biblias y pasar tiempo con nuestra familia”. Él no fue el único que detuvo su fabricación habitual y ahora están produciendo mascarillas faciales, respiradores, y equipos médicos. Muchas otras empresas estadounidenses como Jockey, Honeywell, P&G, UTC y otras ido un paso adelante y están trabajando para apoyar al pueblo estadounidense durante estos tiempos difíciles.
Todos los días, después de que se presenta toda la información, hay una sesión de preguntas y respuestas para los medios de comunicación y ¡oh Dios! Cómo desearía que se transmitieran por completo. Lo que oímos que rara vez es periodismo, en su mayoría son intentos de pescar una o dos palabras, sacarlas de contexto y ejecutar un día completo o incluso una semana de noticias que engañan a la gente con la pequeña pieza que tienen. Son vergonzosos. Los llamados periodistas no parecen estar interesados en hacer el trabajo que se les encomendó hacer.
¿Cómo es que son capaces de salirse con la suya con todo eso? ¿De quién es la culpa? Bueno, la culpa es NUESTRA. Nosotros, el pueblo, somos responsables de ello porque no les exigimos respeto y no exigimos que hagan informes imparciales reales. Merecemos algo mejor, pero somos responsables de la vergüenza de “reportajes” que recibimos porque seguimos confiando en los titulares que leemos en las redes sociales. Seguimos confiando en los medios de comunicación tradicionales; seguimos confiando en los memes y nos negamos a hacer nuestra tarea de obtener nuestra información directamente de las fuentes. Nos hemos puesto cómodos y las cosas no cambiarán hasta que nos cansemos de ello. Esperemos que para entonces no sea demasiado tarde.

 

“When I can read a news story and I have no idea what side of the story the reporter is on, THAT’S a good news story.” -Sarah Elizabeth Sanders. I find that statement not only truthful, but it also serves as a reminder of what journalism once used to be.
According to the American Press Institute “Journalism is the activity of gathering, assessing, creating, and presenting news and information.” Unfortunately, nowadays talk, entertainment, opinion, assertion, advertising and propaganda are being confused with journalism and anyone with a mobile device or paid air time believes to be doing ‘objective journalism’ when most of the time they’re just putting their feelings, biases and emotions out there.
We are currently in the middle of a worldwide health crisis with COVID-19 and the last thing we need is the continuous promotion of division and hatred. It doesn’t matter which side of the aisle the “information” comes from, those delivering it to us should at least think twice before fear mongering, sensationalizing and manipulating us with it.
During 9-11, even though those were times of great uncertainty and we all were afraid of what could possibly come, the media projected a clear message of unity, hope, and the assurance that we would overcome…and we did.
The current circumstances have created a similar atmosphere of fear, loss and uncertainty, but this time the media is sending us a doomsday message. They’re pointing fingers right and left instead of highlighting the progress made and instead of making sure the people feel part of the solution, because by staying home, we’re all helping flatten the curve.
Journalism is a science which some consider an art. In general terms, journalism consists of the collection, treatment, interpretation, writing and dissemination of information, through social media, press, radio, television, internet, etc., Its main purpose is to provide citizens with truthful information and over-time to assert their rights before society. Why not just do that?
The first known case of COVID-19 in the United States was confirmed in Washington state on January 20 in a 35-year-old man who had returned from Wuhan, China on January 15. The White House Coronavirus Task Force (WHCTF) was established on January 29. On January 31, the president declared a public health emergency, and placed travel restrictions on entry for travelers from China. The WHCTF chaired by Vice President Mike Pence has been presenting daily briefings filled with valuable information from several specialists who explain where we’re at regarding the crisis, what is there to expect and next steps.
Besides the information and findings presented in these briefings, the message of hope, unity and patriotism being transmitted in them is what the American people needs to hear. We all know we’re in trouble, but we also want to know that together we’ll get through this. Sadly, not all media is accurately reporting what happens at these briefings. Not all of channels are airing them and if they do, they just do it for a few minutes. Instead of promoting unity, they pick bits and pieces from those briefings just to misinform and promote chaos.
I personally have been watching those briefings through the White House’s Facebook page. My children watch them with me every day. Yesterday they were ecstatic that Mike Lindell, the guy from My Pillow said on March 30 that they stopped making pillows to make face masks, A2
they were amazed to hear him say: “God had been taken out of our schools and lives.  A nation had turned its back on God.  And I encourage you: Use this time at home to get back in the Word, read our Bibles, and spend time with our families.” He was not the only one who stopped their usual manufacturing and are now producing from face masks, respirators, scrubs and medical equipment. Many other American companies such as Jockey, Honeywell, P&G, UTC and many more have stepped up to the plate and are working to support the American people during these trying times. Every day, after all the information is presented, there is a Q & A session for the media and oh Lord! How I wish those were broadcasted entirely. What we hear there is rarely journalism, they’re mostly attempts to fish a word or two, take them out of context and run a full day or even week of news misleading people with the little piece they got. They are shameful. The so-called journalists/reporters do not seem to be interested in doing the job they were entrusted to do.
How come they’re able to get away with all of that? Whose fault is it? Well, the fault is OURS. We The People are responsible for it because we don’t demand respect from them and we don’t demand that they do actual unbiased reporting. We deserve better, but we are responsible for the embarrassment of “reporting” we receive because we continue to trust the headlines we read on social media. We continue to trust the mainstream media; we continue to trust the memes and refuse to do our homework and get our information straight from the sources. We’ve gotten comfortable and things won’t change until we get tired of it. Let’s hope by then it is not too late.