“No hice mis Impuestos”: no está solo, hay millones como Usted

La prórroga existe y es fácil, según el Internal Revenue Service (IRS), la agencia federal encargada de recaudar impuestos. La extensión es de seis meses y le da tiempo a los contribuyentes para reunir los documentos y presentar su declaración antes del 17 de octubre de este año.
El IRS considera que “la forma más rápida y más fácil de obtener el tiempo extra” es haciendo la petición de extensión online en su web, dijo en un comunicado. Se trata de la web Free File, que ayuda a rellenar el formulario 4868SP.
Se puede hacer también el trámite con un contador profesional, con un software de preparación de impuestos (como Turbo Tax) o, al estilo clásico, presentando en papel el formulario 4868SP.

¿Sale perdiendo el
que paga más tarde?
En el formulario de extensión, los contribuyentes (o sus contadores) deberán estimar qué obligaciones tributarias tienen este año y saldar las deudas pasadas que puedan tener pendientes con el IRS.
Al presentar el formulario sin errores, el contribuyente evitará una penalidad por presentar fuera de la fecha límite, que normalmente es del 5% mensual sobre el saldo pendiente de pagar al IRS.
Sin embargo, puede haber penalización en caso de que salga a pagar para el contribuyente.
“Con la extensión, no garantizas que no vayas a tener penalidad. Evitas una pero no todas”, explica el contador Giovanni Catellanos, que opera en Miami, Florida. “Pese a la extensión, si tú debes al IRS 1,000, 2,000, 3,000 dólares, al final te van a penalizar sobre esa cantidad”.
De las 13 millones de prórrogas recibidas por el IRS el año pasado, casi 8 millones fueron presentadas electrónicamente.
En algunos casos excepcionales, se pueden presentar los impuestos más tarde sin necesidad de pedir una extensión. Es el caso de los ciudadanos estadounidenses y extranjeros residentes que viven y trabajan en el extranjero, así como los miembros de las fuerzas armadas en servicio fuera de los EEUU.
Según los preparadores de impuestos es común llegar tarde a la fecha límite de abril: “A mucha gente le pasa”, dice el contador Parladé. “A veces los documentos tardan en prepararse. Por ejemplo, si eres accionista en una corporación, esos documentos tardan en llegar”.