¿Le podemos pedir peras al olmo?

Hay un dicho que se adoptó de la influencia española, dice que no se pueden pedir peras al olmo y se usa para designar peticiones que son imposibles de cumplir o realizar. Pedirle peras a un árbol que no las produce es la analogía que se utiliza para expresar una solicitud que por esencia natural es inalcanzable.

Hoy les comparto algunos puntos de vista respecto al caso polémico que generó el uso de recursos públicos a favor de Televisa y de la conductora Laura Bozzo, porque me ha parecido un abuso en detrimento a los damnificados por las recientes tormentas Manuel e Ingrid.

No solo repruebo la parte que le toca a dicha empresa, sino a la injustificada decisión de quién haya autorizado el uso del helicóptero del gobierno para otros fines antes que brindar la ayuda a los afectados.

En este caso, el uso indebido de los recursos públicos hace evidente el clientelismo, un mal que persiste en México. La cadena de favores y devolución de los mismos llegan a tales grados que hasta solucionan los problemas fiscales de sus privilegiados. No olvidemos que a esta empresa de Televisa se le condonaron “en supuesta legalidad” una deuda fiscal de más de 3 mil 334 millones de pesos, y no conformes de tal ahorro, la empresa decidió aprovecharse de las desgracias para sacar más provecho. ¿Por qué no financiaron ellos su reportaje o su supuesto servicio de rescate? Yo creo que con esa condonación de deuda tenían para pagar sus propios helicópteros. Nada se cree de los argumentos que Televisa, Laura Bozzo o el gobierno puedan argumentar para justificar las acciones el uso de recursos públicos para montar un show, ni el hecho que Laura Bozzo se haga pasar como una rescatista, ¿Vieron las fotos?, ¿Qué clase se rescatista es? ¡Si hasta tenían que ayudarla a caminar en el lodo!

Mientras a Televisa le condonan sus adeudos, a nosotros nos quieren cobrar impuestos hasta al alimento de las mascotas, porque supuestamente es un lujo tenerlas. Es incongruente porque asumo que todos tenemos los mismos derechos y obligaciones pero tal parece que se favorece más a los ricos. Y dejo en claro que no estoy en contra de pagar impuestos, así debe ser, lo que molesta es que se les dé un mal uso al producto de la recaudación de nuestras contribuciones.

No sé si sea, “pedir peras al olmo”, pero a la par de reformar la educación en México, ¿Porqué no reforman la Ley para que no se transmitan programas como el de Laura, o esas telenovelas inverosímiles ¡Que prohíban ese tipo de televisión retrasada y dañina que solo embrutece la mente! Ya tenemos demasiado que lidiar con un México en creciente pobreza, y si no se logra un pueblo educado y culto que tenga las capacidades para enfrentar los desafíos para progresar, el panorama futuro resulta negro. Y lo será también para los altos mandos, como ahora ya lo empezaron a vivir el Presidente Enrique Peña Nieto y los gobernadores de los estados que enfrentan un clima de manifestaciones masivas que nunca habíamos visto.

Es evidente que la televisión no va a cambiar sus contenidos para que se promueva la cultura y la educación, así tienen su audiencia. Lo cuestionable y que enfatizó la reconocida periodista Carmen Aristegui fue el uso de recursos públicos. Si Televisa o esa señora siguen con sus programas están en su derecho, pero que lo hagan con sus propios recursos.

Los que si deben cambiar porque nos representan y deben administrar correctamente nuestros recursos, son los funcionarios públicos, ya que estos deben conducirse con transparencia, con honestidad y honradez. Creo que es pedir aparte de peras alguna otra fruta al olmo.

Es impresionante como la corrupción, la impunidad, el clientelismo político, etc., etc., se extienden y se infiltran en todos los ámbitos. El pueblo de México se está cansando de tanta ignominia, el hartazgo está floreciendo se hace evidente en las redes sociales con las que nos enteramos de mucho de lo que nos ocultan los medios vendidos, como Televisa.

Laura Bozzo se justifica y dice que no fue un montaje, pero eso sí, supo elegir el lugar dónde las afectaciones fueron mayores, para que el drama y su incursión a rapel se vieran espectaculares, para que las imágenes en los videos y fotografías fueran impactantes y ella quedara como una heroína junto con su deprimente empresa Televisa. Pobre gente, y digo pobre en el sentido de la pobreza que existe en ese estado de Guerrero, y parece que les llueve sobre mojado.

Un tiempo antes, si recuerdan amigas y amigos, el CONEVAL publicó las cifras sobre la pobreza en México, ¿Recuerdan? 53.3 millones de pobres. Entre los estados con mayor pobreza fueron Puebla, Chiapas, Oaxaca y Guerrero, siendo estos tres últimos los que presentaron más casos de personas en pobreza extrema.

De acuerdo al CONEVAL, Guerrero es uno de los estados dónde aumentaron las personas con pobreza de 67.6 % en 2010 se incrementó en 2012 a 69.7%, para colmo de males este estado ha sido uno de los más afectados por los fenómenos meteorológicos recientes por lo que el número de pobres habrá aumentado en estos momentos, imaginen toda esa gente que se quedó sin nada.

Deseo por el bien de esa gente y de México, que ocurra una especie de milagro para que nuestros representantes en el gobierno encuentren el rumbo para resarcir lo más pronto los daños. Yo espero que el Presidente Enrique Peña Nieto, haga valer sus compromisos firmados en campaña, que impere en su gobierno la rendición de cuentas y la transparencia, la justicia, la igualdad, la inclusión, que combata el hambre, que lo que declaró de buscar a los responsables que autorizaron asentamientos humanos en zonas de riesgo, los encuentre y sean castigados. Que Televisa cambie y brinde contenidos que promuevan la educación y cultura.

¿Será pedirle peras al olmo?, ante el estado de las cosas creo será más fácil que las peras del olmo se hagan realidad, pero con procesos de biotecnología para transgénicos, ya que lo expuesto en el párrafo anterior parece imposible.

De ciudadana a ciudadanos, su amiga Dora María Hernández Guevara.