
¿Las computadoras deciden por ti?
Algoritmos, los nuevos paradigmas del siglo XXI
¿Qué es un Algoritmo?
“Un algoritmo es un conjunto de reglas que establecen, con precisión y anticipación, una secuencia de operaciones en un espacio tiempo definido”…. ¡he! ¡he! ¡he!.. ¿qué dijo?… Ok, vamos de nuevo…
“Un algoritmo es un conjunto de instrucciones que describen cómo realizar una tarea”… esto significa que, incluso, una receta de cocina, puede ser entendida como un algoritmo.
En términos tecnológicos, en el siglo XXI, cuando hablamos de algoritmos, el tema es más específico, porque la mayoría son ejemplos del aprendizaje automático, es decir, que en lugar de procesar repetidamente un conjunto estable de instrucciones, los sistemas reescriben, ellos mismos sus instrucciones a medida que aprenden, esto es lo que asusta a algunas personas, ya que hace que los algoritmos analicen sus experiencias y las incorporen a sus instrucciones, como haría un ser humano inteligente.
¿Qué pueden hacer
los algoritmos?
En estos días cumplen múltiples propósitos, desde contabilizar los visitantes a tu sitio web, hasta la automatización de la bolsa de comercio, desde encender o apagar la luz de una habitación hasta la visión artificial, en el que identifican los rasgos faciales de una persona en una pantalla. De hecho, el más utilizado es el asistente digital Siri o Cortana, que es una aplicación de voz inteligente, que conversa y es capaz de responder consultas o pregunta, ya que sus operaciones algorítmicas buscan las respuestas adecuadas a cada persona.
No dudo que gracias a los algoritmos, tuviste la experiencia de conectarte con familiares y amigos, que no veías hace tiempo, a través de listas de Facebook y otras redes sociales.
Para llevar a cabo estos interesantes software, los algoritmos crean archivos complejos de cada usuario, que al sumar los clientes de Google, Facebook, Amazon, el asiático Alibaba y otras redes, resultan más del 70% de los habitante de la tierra, el tema es que los algoritmos saben mucho sobre nosotros, incluso más que nosotros mismos, esto es una consecuencia del tamaño de las empresas mencionadas, como de la complejidad de los programas algorítmicos utilizados.
¿”Decibilidad” contra
libre albedrio?
En el siglo XXI, el concepto de algoritmo se utiliza para definir la noción de “decidibilidad”, es decir, un algoritmo es el mecanismo con el cual el sistema informático “anticipa” en forma lógica, las posibles decisiones, respecto a gustos y necesidades de cada cliente.
Un algoritmo es capaz de establecer, antes que la misma persona, cuáles serán sus necesidades y deseos, de esta forma puede ofrecer con anticipación los productos requeridos para cada individuo en particular, de acuerdo a sus gustos y exigencias.
Esto que parece ciencia-ficción o futurología, es parte del quehacer cotidianos en estos momentos, ya que todo esto nace a partir de las redes sociales, lugar que confluyen el 75% de los habitantes de este planeta, donde todos y cada uno, describen sus deseos y sus sueños, pero también “informan” sus realidades, como su nivel económico, su nivel educativo, su entorno familiar, su gusto alimenticio, su gusto sexual, su lugar de nacimiento, su lugar de residencia, sus lugares de vacaciones, su cultura, su religión, su entretenimiento, mas todos los etcéteras que deseen agregar.
Por supuesto todos estos datos sirven de “alimento” a los algoritmos, para crear una “ficha técnica” de cada uno de nosotros, decidiendo qué noticas nos interesan, qué películas nos gustaría ver, quienes son nuestros amigos, cuáles son nuestros gustos literarios o lugares de comida, pero lo importante es que los algoritmos no deciden por nosotros, ni influyen en nuestras decisiones, solo las anticipan..
Como en todos los casos, existen defensores y detractores de esta red de información algorítmica…
Los defensores dicen que, ante la creciente y casi infinita cantidad de información que circula en las redes, los algoritmos son útiles para limitar esa información a nuestros gustos e ideas, haciéndonos llegar las adecuadas a cada uno, tanto a nivel cultural y social.
Los detractores dicen que, justamente al limitar la información a nuestros gustos e ideas, nos aíslan del resto, retroalimentando nuestro cerebro con “más de lo mismo”, sin permitirnos comparar, creyendo que la única verdad es la nuestra.
En realidad todos tienen razón, pero olvidan que los creadores de los algoritmos, solo desean conocer nuestros gustos y necesidades, para ofrecernos los productos adecuados. Culpar a los algoritmos, de nuestra quietud o comodidad, es insólito, queda en nosotros romper ese límite de confort que nos dan los algoritmos, para buscar en las redes lo que realmente deseamos, investigar qué ideas o gustos confrontan a los nuestros, es prerrogativa exclusiva de cada uno.
Para conocer mas sobre el tema les recomiendo mi nuevo libro “AMAZON y sus algoritmos”
Hasta la próxima
semana…
Cesar Leo Marcus