¡Guerra al colesterol!
¿Qué es el colesterol?
Tampoco hay que exagerar, la excesiva preocupación de la gente e incluso en el sector médico sobre el colesterol en la alimentación lleva en muchos casos a tomar medidas innecesarias y totalmente extremas. Unas restricciones en la dieta que no consiguen acabar con el colesterol y consiguen una alimentación incompleta y carente de muchas propiedades necesarias, en especial en la dieta de los niños.
Se trata de un esterol, una sustancia con una estructura muy parecida a las grasas que nuestro organismo sintetiza en la zona del hígado. El colesterol no tiene calorías, por lo que no está relacionado con el peso ni con la energía. A diferencia de éstas, el colesterol no nos activa.
Hablamos de una sustancia fundamental en las membranas celulares y, sobre todo, en la estructura del sistema nervioso central, ya que actúa sobre la mielina, que aísla los nervios. Además, es uno de los encargados de la producción de la vitamina D.
El colesterol es un lípido que se encuentra en los tejidos corporales y en el plasma sanguíneo de los vertebrados. Se encuentra en grandes cantidades en el hígado, la médula espinal, el páncreas y el cerebro.
Etimológicamente la palabra “colesterol” proviene del griego: kole (que significa bilis) y stereos (sólido), ya que el colesterol se detectó por primera vez en los cálculos de la vesícula biliar por el químico francés Michel Eugene Chevreul, quien lo bautizó como “colesterina”.
El colesterol no está presente en las membranas celulares de todos los seres vivos, solamente se manifiesta en las de los animales, por eso cuando en un producto de frutas, verduras, cereales o fibras leemos que está libre de colesterol, los fabricantes se aprovechan de la incultura del consumidor, pues es imposible que un vegetal, tenga colesterol. Sin embargo, el colesterol es fundamental para el correcto funcionamiento del organismo, aunque éste se encarga de producir todo el colesterol que necesitamos. Se vive mucho mejor tomando poco colesterol.