Despídete del Cigarro
Por supuesto que puedes decirle hasta nunca al cigarro y puede resultarte más sencillo de lo que crees, porque las mejores herramientas para lograrlo están justo en tu interior. La idea de que es muy difícil abandonarlo es todo un mito, porque la mayoría de las personas consiguen dejarlo por decisión propia, sin apoyo, tratamientos ni fármacos, y logran deshacerse de esta adicción gracias a su propio convencimiento y perseverancia.
Si éste es tu propósito, te recomendamos probar primero con terapias alternativas, antes de engancharte con medicamentos sustitutos de nicotina o reductores de ansiedad, que sí son eficaces pero también tienen efectos secundarios. El Dr. Santiago de la Rosa, experto en terapias alternativas, asegura que “las medicinas naturistas son muy eficaces para dejar de fumar, porque ayudan a aliviar estrés y desequilibrios biológicos, que son desarreglos que incitan al tabaquismo”.
La llave está
en tu mente
Una de las terapias básicas es la psicológica, que desactiva cualquier condicionamiento que tengas. La terapia psicológica en sesiones personales o en grupo en las que intercambies tus experiencias, puede ser con un psicólogo, un psiquiatra o un médico debidamente preparado.
El profesional te enseña a conocer tu perfil como fumadora y al saber cómo se comporta tu mente, las características de tu hábito de fumar, tus disparadores y tus situaciones de riesgo, y a comprobar que puedes anticiparte a ellas, evitarlas o contrarrestarlas. Esto te reafirma en tu decisión, fortalece tu autocontrol y ganas cada vez más confianza en ti misma.
Para salir triunfante de tu intención de dejar este vicio, el psicoterapeuta te enseña una serie de recursos. Por ejemplo, ante una situación de riesgo que favorezca que caigas en la tentación de fumar, te prepara para cambiar de conducta en lugar de permanecer pasiva. Así podrás identificar, anticiparte y evitar situaciones que disparan tus ansias de fumar y tendrás estrategias para desactivar estas situaciones de riesgo, porque para cada una existen alternativas:
Si estás con tus amigos o personas que fuman, cambiar de lugar o sal de ahí.
Si estás sola y empiezas a pensar en prender un cigarro, llama por teléfono a alguien.
Si fumas durante el café con tus amigos, te conviene dejar esas reuniones por un tiempo.
Si acostumbras fumar después de desayunar, debes levantarte más temprano.
Agujas
que te calman
La acupuntura es un método oriental milenario que consistente en clavar agujas muy finas en determinados puntos de tu piel, para que tu organismo equilibre sus energías eléctricas y tu cerebro libere endorfinas, unas sustancias que producen bienestar y relajación. Durante la sesión te insertan algunas agujas en el cuerpo y como complemento te dejan otros pequeños clavitos o balines insertados en el lóbulo de la oreja, para mantener esos puntos estimulados y prolongar por varios días el efecto de la terapia.
La acupuntura se basa en que cada órgano tiene infinidad de células con cargas positivas o negativas. Cuando hay un desequilibrio energético, ese desarreglo recorre el cuerpo en ciertas líneas y produce ansiedad y estrés.
Pero se corrige pinchando ciertos puntos, logrando así que te sientas mejor, te relajes, y así tengas menos ansias de fumar. También así se logra desintoxicar a tu organismo de las sustancias nocivas del cigarro, e incluso se puede lograr que llegues a sentir asco ante la nicotina.